Una de las cosas más increíbles de estudiar en otro país es hacer amigos de todas partes del mundo. Se aprende muchísimo conviviendo con gente de diferentes culturas, costumbres e idiomas. Pero ¿cómo conocerlos? Es normal que al principio te sientas intimidado por la situación y no sabes a ciencia cierta cómo acercarte a ellos para entablar conversación. ¡Hay varias formas de dar el primer paso y estar en los entornos propicios para crear amistades que prometemos durarán toda la vida!
A continuación se listan algunas formas divertidas y seguras de hacer nuevas amistades mientras se estudia fuera.
1. Ponte en contacto con los estudiantes de la universidad
Puedes empezar a hacer amistades, incluso antes de viajar. Un buen consejo es entrar en contacto con los estudiantes de tu nueva universidad ya sea por correo electrónico o por las redes sociales y empezar a chatear con ellos antes de partir. Así al llegar al extranjero, ya vas a haber tenido contacto y podrás finalmente conocerlos personalmente.
2. Asiste a la orientación inicial para los estudiantes internacionales
La mayoría de las universidades extranjeras acostumbradas a recibir estudiantes internacionales hacen una gran recepción de orientación para ayudar a conocer a la institución, el campus y la región y también informar sobre las normas, deberes y derechos. Todo esto hace que la participación en el evento sea importante, porque es el primer contacto directo con la universidad, sus colaboradores y profesores. ¡Y sus estudiantes! Principalmente otros extranjeros en la misma situación. O sea, una excelente oportunidad de conocer a quienes también están comenzando sus estudios en la misma época y desean hacer amigos a su llegada.
3. Trabajos en grupo
Para algunos un gran dolor de cabeza, pero los trabajos en grupos en un curso en el extranjero serán una muy buena oportunidad de conocer a los compañeros de clase y quién sabe a lo mejor formar un grupo fijo para los próximos trabajos, lo que facilitará cuando los profesores pidan para trabajar en parejas o en grupos. Por ello, aunque seas el tipo de persona que no le gusta el trabajo en equipo en el aula, mantente abierto a las nuevas amistades que ellos puedan ofrecer.
4. Participar en clubes, organizaciones y equipos estudiantiles
Las organizaciones y clubes estudiantiles son una de las cosas más divertidas en las universidades internacionales. Puedes hacer parte de cualquiera y cuantas quieras. La mejor parte es que en ellas encontrarás personas con intereses y hábitos similares a los tuyos. Por ejemplo, un club de fotografía o de una organización de estudiantes internacionales. Todos ellos realizan reuniones periódicas y organizan eventos para que sus miembros puedan conocer y practicar una actividad en común. ¡Y también tienen equipos deportivos universitarios! Una excelente forma de hacer amigos, mantenerse en forma y construir una carrera en el deporte (y quién sabe, hasta conseguir una beca de estudio).
5. Pasear, charlar y estar abierto a salir de tu zona de confort
Estudiar fuera, inevitablemente, significa salir de la zona de confort. ¡Y eso es muy bueno! En todos los aspectos, la experiencia ayudará a crecer de muchas maneras. Una de ellas es salir de la burbuja y entablar conversación con personas desconocidas y en un idioma extranjero. Va a ser raro al principio: sentirás inseguridad, tal vez no sepas exactamente sobre qué hablar y tengas miedo de que la persona no esté al final de la conversación. Sólo debes decir hola, hablar algo acerca de la universidad o sobre el país, y dejar que la conversación fluya como cualquier otra. Acuerden visitar algún museo o bien hacer una cena con platos típicos de cada país. Montar un grupo de estudio semanal. Marcar un viaje de fin de semana. ¡Las posibilidades son infinitas!